Los gallumbos de Joan Laporta


La Guardia Civil está en alerta máxima. Han recibido el aviso de que un presidente de fútbol puede intentar acceder al aeropuerto en gallumbos. Incluso se ha hecho un retrato robot, pero no del personaje, sino de los calzoncillos. Son unos Calvin Klein azulgranas que llevan dibujados tres copas correspondientes a cada uno de los títulos que ha ganado el Barça en la última temporada. Incluso parece que no están nada limpios. Se especula con que el miedo al nuevo proyecto de Florentino Pérez ha dejado su sello...
Todos los indicios apuntan a que el buscado es Joan Laporta. El presidente del Barça anda muy mosqueado. Por primera vez en la historia de un equipo español de fútbol se logra el triplete, y una semana después nadie habla de ellos. Con lo que le gustan los flashes y titulares abrazafarolas a Joan... y resulta que nadie le presta atención. La noticia más destacada del equipo de Guardiola en los últimos días ha sido la bandera que el loco de Jimmy Jump le colocó a Roger Federer en la final de Roland Garros.

Por eso Laporta ha decidido tomar cartas en el asunto. La posibilidad de que se quede en ropa interior en el aeropuerto ha vuelto a cobrar vida. Sin duda que sería una buena forma de recuperar espacio mediático. Su plan sólo tiene un pero: teme que Florentino se le adelante y que, además, marque mucho más paquete que él.

Por sus actuaciones y declaraciones diría que Joan Gaspart le está asesorando. No encuentro otra explicación. Cuando Laporta está en Nueva York firmando la renovación del contrato con UNICEF habla de la prepotencia del Madrid. Cuando vuelve a Barcelona insiste en que el Madrid es un equipo imperialista. Si se pone a disputar una pachanguita declara que los blancos tienen sus orígenes en el chollo...
Pues no señor Laporta. Las cosas no son así. Ahora entiendo por qué no le soportan ni sus propios socios. Muchos madridistas somos madridistas porque nuestro club representa unos valores opuestos a los que usted pregona. Creemos que el fútbol es un deporte que se practica para disfrutar o que se ve para pasar un buen o mal momento, dependiendo de si se gana o se pierde. Pero sólo eso. Se lo juro, nada más. Un balón no es un arma política. El único daño que produce es la ronquera de muchos seguidores que celebran gritando los tantos de su equipo. Esta temporada, hay muchos culés con las gargantas dañadas de tanto título que han ganado. No lo estropee. Tritanquilícese, pero vestido...

2 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo con usted, señor Luismi. Mi interés por el fútbol decayó radicalmente cuando mi nómina dejó de deperder de él, pero reconozco que aún sigo con cierto interés las noticias provenientes de este mundillo. Me sorprende (lo mío es pura ingenuidad) lo que se paga por algunos jugadores, pero aún me sorprende más el comportamiento de personajes como Joan Laporta. Lo suyo es puro afán de protagonismo. No es que Florentino sea santo de mi devoción, pero lo del presidente azulgrana es la típica rabieta de niño malcriado poco acostumbrado a que le quiten el protagonismo. Al fin y al cabo, egocéntricos los hay en todas partes y el mayor del reino azulgrana es ese señor que cuando habla pronuncia palabras tan grandes como imperialismo.

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  2. En desacuerdo Luismi. La actitud de Laporta es comprensible porque sencillamente lo que acapara portadas no son (de momento) nada más que quimeras por parte de una prensa que en esten pais es practicamente afín al club de Concha Espina.

    Florentino puede comprar todos los ingredientes que quiera, pero con los susodichos ha de intentar preparar un menú a la altura, cosa que que ya ha hecho este año el Barça, que como tu dices, le ha durado el protagonismo de la mayor gesta de un club español en la historia, una o dos semanas.

    Puede que Laporta tenga pataleta, pero viviendo en un mundillo claramente pro-madridista no sé de que se extraña.

    Como opinión personal, diré que me parece una salvajada las tacticas de Florentino Pérez, cosa que no hace mas que fomentar el bipartidismo, cosa que ya en España nos mola ya no solo en la política, sino también en el fútbol.

    Una pena que la prensa solo tenga ojos para estos dos, obviando así las barbaridades, desfalcos y sinvergonzadas que llevan haciendo sus dirigentes a clubes como Atlético de Madrid, Valencia o Betis, por poner simples ejemplos.

    Un saludo, fiera.

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